Dramaturgo, pero también crítico y director escénico, la vida de Samuel Eichelbaum significó una ofrenda integral al teatro. Su obra no cae en ningún momento en el "facilismo" ni en la búsqueda a ultranza del éxito, tal cual ocurriera con tantísimos de sus contemporáneos.
Dramaturgo, pero también crítico y director escénico, la vida de Samuel Eichelbaum significó una ofrenda integral al teatro. Su obra no cae en ningún momento en el "facilismo" ni en la búsqueda a ultranza del éxito, tal cual ocurriera con tantísimos de sus contemporáneos.